A la hora de organizar un viaje, podemos optar por acudir a una agencia tradicional, de las muchas oficinas que están repartidas por nuestro país, o bien elegir una agencia virtual online, donde se puede reservar de igual forma, pero mucho más rápida y cómodamente. Las vacaciones pueden programarse por uno mismo, dentro de las opciones que ofrece la agencia virtual, y efectuar la compra en el acto. Podemos elegir el destino, el medio de transporte, la forma de pago e incluso las actividades que realicemos en el lugar que visitamos, como excursiones a pie, senderismo, navegación, buceo, vela, surf, ciclismo, hípica, rafting, parapente, etc. Incluso podemos contratar la asistencia a cualquier evento que se celebre en la zona en la que nos encontramos, como encuentros deportivos, musicales, artísticos y de cualquier variedad.
Otra ventaja que ofrecen las agencias online es que nos permiten siempre la posibilidad de elegir los viajes más baratos, las compañías que queramos y la combinación de fechas a nuestro gusto. En este sentido, la oferta tanto económica como de viajes es mucho más amplia, pero por otro lado, esta forma de compra no es acertada para personas que no estén muy familiarizadas con la búsqueda en internet. Por eso, se nota una cierta tendencia de los jóvenes a contactar con agencias online, mientras que el público maduro sigue decantándose por las agencias tradicionales.
Como ya hemos dicho, la irrupción de internet en la vida cotidiana ha hecho que el sector se revolucione. Muchas aerolíneas y empresas de transporte empezaron a vender sus productos a través de la red, directamente al consumidor; por ello, se dejaron de pagar comisiones a los agentes de viaje por cada billete vendido. Desde mediados de los años noventa, las agencias de viajes han sido víctimas de la desintermediación, y uno de los primeros costes a recortar por las compañías low cost. De este modo, muchas de las agencias tradicionales se han pasado a la era online, y ya venden sus productos a través de internet. Para los usuarios esto tiene sus ventajas, ya que permite comparar las cuotas de las múltiples empresas hoteleras y aéreas de forma gratuita. También permite ordenar los paquetes de viaje por servicio, vuelo, tipo de actividad, hotel, etc.
Pero por otra parte, a veces también nos encontramos con que si compramos a la agencia por ejemplo un vuelo, éste puede salirnos más barato que haciéndolo directamente a la compañía aérea; la razón es que las aerolíneas pactan con las agencias un precio más bajo que el estipulado para la venta directa al público, porque éstas venden un gran volumen de vuelos al año, y son consideradas como clientes especiales, de ahí que se les haga un precio especial. Así, además del precio, también deberemos tener en cuenta otras características antes de elegir, como que las agencias (sobre todo las tradicionales) pueden anular un viaje si no llegan a cubrir todas las plazas, un mínimo de personas para que el viaje salga rentable; pero siempre debe especificar cuál es este número y la fecha límite para avisar a los clientes de la anulación, en ningún caso inferior a los diez días antes de la fecha de inicio del viaje. Y sobre todo, estar muy al tanto de nuestros derechos y deberes como usuarios, para evitar posteriores decepciones y sorpresas desagradables.