Para muchas personas, el lugar idóneo donde celebrar las fiestas navideñas es su propio hogar, sentados alrededor de la mesa compartiendo comida y villancicos con familiares y amigos. Pero para otros, la Navidad es la excusa perfecta para viajar y desconectar de la rutina diaria, visitando lugares exóticos para escapar del frío o grandes urbes donde realizar compras a buen precio y disfrutar de unas vacaciones culturales.
Lo importante es planificar el viaje con tiempo para poder escoger entre diversas opciones y lograr una buena relación calidad precio (además de evitarse sorpresas y prisas de última hora). De todos es sabido que la Navidad especialmente es una fecha que se celebra en todo el mundo, por lo que la demanda es muy elevada, y aunque la oferta también lo es, los mejores paquetes vacacionales suelen durar poco en el mercado.
Cuanto antes se busquen las ofertas mejor, incluso si es con un año de antelación, nunca esta de más anticiparse en este sentido. Así, además de hacer la reserva, se tendrá mas tiempo para ahorrar dinero que poder gastar en el viaje, preparar actividades, rutas, información…. y evitarnos el estrés del ultimo minuto. La planificación también es muy importante sobre todo a la hora de preparar viajes de grupo, ya que no es lo mismo coordinar a dos personas que a un numero considerable, por eso de compatibilizar agendas y preferencias.
Muchas personas buscan algo diferente de sus lugares de orígenes para pasar las fiestas navideñas. Es importante enterarse bien de las costumbres del país o lugar que va a visitarse antes de viajar, para no llevarse ninguna sorpresa. Hay lugares que tienen acontecimientos locales muy típicos y esperados (temporada de compras, actuaciones y cabalgatas callejeras, decoración espectacular, eventos musicales y religiosos) y merece la pena programarse para poder asistir a cuantos podamos. La tendencia es que las personas que viven en lugares calurosos suelen viajar a países fríos, para vivir una típica blanca navidad y poder disfrutar de la nieve.
Los destinos estrella en este sentido son las estaciones de esquí (por ejemplo, en Centroeuropa), donde además de practicar este deporte se pueden hacer compras típicamente navideñas; Andorra en este sentido tiene mucha demanda, por su gran surtido de artículos de lujo a buen precio y por sus instalaciones de calidad. Por el contrario, las personas que viven en lugares fríos y cuyas temperaturas en invierno son extremadas, tienden a escaparse por estas fechas a lugares paradisíacos, generalmente islas como las Canarias e incluso fuera de nuestras fronteras, como el Caribe. Otra opción usual en estas fiestas es viajar a lugares para compartir unos días en familia, sobre todo para que disfruten los niños, a parques temáticos como Eurodisney.
Eso si, hay que tener en cuenta sobre todo que al ser temporada alta debemos estar preparados para desembolsar una buena cantidad de dinero, pues los precios de los servicios generalmente suben debido a la gran demanda. Debemos pues estar preparados también para posibles eventualidades, como retrasos en los vuelos, overbooking, aglomeraciones y demás molestias típicas de las fiestas. De igual forma, hay que tener cuidado con lo que se come y lo que se bebe, sobre todo si no sabemos su procedencia o preparación, y porque es usual en estas fechas cometer excesos.